Fernanda Neil fue una de las personalidades más avasallantes que pasaron por Gran Hermano Famosos. Es que la morocha, que participó de Chiquititas e hizo un papel muy caliente en Doble Vida, hizo reír al público con su espontaneidad y con sus comentarios picantes.Neil sobrevivió varios meses en la casa y se convirtió en la primera finalista. Y, cuando Jorge Rial le informó anoche que era su turno de abandonar el reality, no dudó en manifestar su alegría y conformidad por el juego y aseguró estar feliz con la noticia.
La joven abrazó a sus compañeros y salió del inmueble, donde la esperaba Mariano Peluffo. Al ver a sus dos tías, explotó en llanto y corrió a saludarlas.
Una vez en el estudio, se mostró triste porque no estaba su novio Mauro y le contó a Rial que a veces en la casa no había límites y no quería enroscarse, por eso en ocasiones optó por contenerse.
Aunque no cree haber hecho nada como para arrepentirse, sintió que en varios momentos sus compañeros la señalaron y confesó que siempre hizo las cosas porque se divertía y quería hacerlas.
La diosa habló sobre el simulacro de Kamasutra que hizo con Lissa, Carlitos Nair, Robertino Tarantini, Cinthia Fernández y Pablo Tamagnini. Dijo que todo "fue un juego y que lo hizo para reírse un rato".
Además, justificó la situación argumentando que el hecho de ser actriz le genera mucha confianza con su cuerpo, sabe trabajar y conectarse con los otros y no tiene pudor.
Una chica muy sexual
Durante reiteradas ocasiones, la mayor parte de los chicos que convivían en la casa manifestaron sus ansias de relaciones sexuales. Y Fernanda estuvo lejos de ser la excepción.
Ella misma confesó tener en su casa un "aparatito personal" que adquirió en Alemania. “Es fantástico porque tiene como siete velocidades. Lo tengo en mi mesa de luz, es muy útil y me encanta porque las velocidades van subiendo y después bajan en el mismo ritmo”, indicó.
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