jueves, 28 de febrero de 2008

Dallys Ferreira en revista Hombre

Desde cuándo sos francesa?!
-(Risas) Estoy haciendo “Mister New York” con Marcelo De Bellis y ahí interpreto a Señorita Paris. Es una francesita que llega engañada a la casa del protagonista. La verdad es que estoy re contenta con este papel, sorprendida porque tengo mucha participación en la obra.
-Pero a nosotros nos gustas como paraguaya... sabés que existe una posición con ese nombre, ¿no?
-Ay, una vez fui a Chile a un programa de televisión y me preguntaron por eso. Como no sabía les seguí la corriente, recién cuando terminó me avisaron qué significaba. Me pasó lo mismo en Argentina cuando me decían gauchita... Igual ya sé a lo que apuntás: ahora conozco la posición paraguaya y es una de mis preferidas.
-¿Alguna otra pose que quieras recomendarnos?
-Es que no creo que el tema pase por una posición. Depende mucho de cada persona, de la sensibilidad, hay algunas mujeres que necesitan más acción que otras, otras que se sienten más cómodas yendo más lento. En Paraguay decimos (en guaraní) “kuremano”, cuando la chica se tira y se hace la muertita...
-¡No me digas que esa la hacés!
-No, no hago eso. Las chicas tenemos que ser más...gauchitas, como dicen acá.
-Bien, entonces la previa es importante.
-Muuuy importante. Pero hay algo que a mi me gusta y es que las cosas se den naturalmente, sin planear nada. No me gusta cuando él dice “vamos a hacer tal cosa”. Soy de las que le gusta el uso de la pasión, dejarse llevar por el momento y sobre todo variar la rutina, si no no nos gusta y nos ponemos de mal humor.
-Epa, demasiado exigente...
-Si, somos así. Hay que ir variando con todo, ir probando nuevas cosas, seducir permanentemente, así no se agota la pasión. A las mujeres nos aburre cuando se repite todo y no hay inventiva. Ahí es cuando decimos “nos duele la cabeza”, jeje... bah, eso no se lo creen más. Directamente le decimos que estamos ovulando y salen corriendo.
-Mirá que nosotros nos quedamos, eh... tirame cómo es un buen entre.
-Le doy mis consejos para la señora. En ese momento no importa si somos 90-60-90: hay que seducir, jugar y motivar. El tema es ratonear a tu pareja y así uno se mete en clima, cada uno se va incentivando. El baile es un punto muy importante, poner velas en la sala, una buena música y un trago...
-De alcohol supongo...
-Si, claro. En esos casos el alcohol como que te saca el lado más perra, provoca mucho. Después de eso hay que ir al juego de mirame y no me toques.
-¿Cuál es tu lugar preferido?
-Siempre hay que ir cambiando, pero me gusta mucho el balcón. Claro que hay que tener un árbol que te tape, porque si no la gente pasa...
-¿Y en tu departamento se puede?
-No quiero dar la alarma a los vecinos y que se vengan las quejas, pero tengo un muy buen balcón (risas). Con el tema de los ruidos no sé qué pasó, pero se dejaron de quejar.
-Tenemos lugar. ¿Horario?
-De noche, me parece más romántico. Y si llueve mejor. No miro el pronóstico pero si se viene la lluvia vuelvo rápido a casa.
-Está casi todo, falta saber cuál es tu especialidad.
-De parte de mi novio no he recibido más que halagos. No tengo un itinerario, intento hacer todo bien completito. Lo que si puedo decir es que soy muy obediente.
-¿Y recibís la devolución?
-Claro que recibo respuesta y está muy bien. Mientras estemos entre los dos vale todo. Lo que pasa es que vengo de un país muy machista y en la cama soy bastante tradicional. No me gusta que a los chicos les guste cosas raras, quiero que los roles estén muy bien marcados.
-No hay trío. ¿Y algún chiche?
-Todavía no tenemos la necesidad de buscar los juguetitos, tenemos con qué divertirnos. Por ahora no hace falta, pero hay que ver más adelante.
-Naciste en Ciudad del Este. ¿Qué tul los brasucas?
-Conozco un montón, pero sabés que nunca tuve una historia con un brasileño, así que no puedo decirte si son tan fogosos como cuentan. Lo que sí sé es que las chicas son, digamos...más rápidas. Tienen cero problemas, cero estrés, los muchachos lo único que hacen es servirse.
-¿En Paraguay no es así?
-Es muy machista, por cada hombre hay cinco mujeres. Es difícil para las novias, porque tienen muchas competidoras. Como todas me tocó sufrir y llorar...
-Y te vengaste...
-No, no soy despechada. Todo lo que hago es porque me gusta y tengo ganas, pero nada de andar tomándome venganza.
-Igual con nosotros nada de eso. Somos como tu primer novio.
-Desde que terminó el scouting de Diosas hasta hoy pasó un año. Son ese novio al que vuelvo siempre... casi que ya estoy casada con Hombre.

No hay comentarios: